lunes, 23 de enero de 2012

El amante

Hola lectores
Desde un día gris, húmedo y caluroso de verano, les envío "El amante" Un cuento breve que juega con la ignorancia de los niños sobre las pasiones de los mayores.
Un abrazo
Pascual



EL AMANTE


Siento alguna curiosidad y me hago preguntas sin respuestas ¿Por qué voy detrás de ese dolor necesario? El mismo que me permite sobrevivir en este asunto del amor ¿De dónde salen las ideas y la fuerza que me abunda para transitar esta pasión y el romanticismo de tanta juventud amontonada?
Ayer, después del ardor de la fiesta, un poco antes de despedirme de ella, no pude aguantar otro espacio vacío y le robé su voz. Al principio la escondí detrás de las orejas donde luego la recogió mi alma.
Ahora, cuando quiero, escucho su canto con sabor de piel enamorada. Pero no me alcanza, no puedo dominar una lágrima terca, rabiosa y sufro una cadena de intemperies con relámpagos de amor. Prisionero tras los barrotes del pensamiento que la hacen vivir en mí, mi nieto me libera, hace que vuelva, pregunta.

-- ¿Qué te pasa abuelo, estás llorando?
-- Sí, un poco.
-- ¿Por qué abuelo?
-- Porque Caperucita se comió al lobo.
--¿Me estás jodiendo?

Entonces reímos y lo disfruto, pero sigo con mi mochila pesada de coraje sin usar, del que duele y no te da ninguna alegría.

-- ¡Dale abuelo! ¿Decíme por qué estabas llorando?
-- Porque tomé mucha agua y no quería ir a hacer pis, se me desbordó por el ojo.
-- ¡Ufa che, contáme!
-- ¿Si te lo cuento, te vas a dejar de joder?
-- Sí.
-- ¿Me lo prometés?
-- Si, pero decíme la verdad.
-- Estoy enamorado.

Entonces volvemos a reír y lo disfruto, vaya que nos reímos… Hasta que vuelve a preguntar.
Pascual Marrazzo ©

No hay comentarios:

Publicar un comentario