Hola lectores
Desde la primera hora de un lunes de verano alunado y caliente, les envío “La pila” Un raye de pila caprichosa y de alta fidelidad.
Un abrazo
Pascual
Todas las veces que tuve la oportunidad de mirarte se encendieron mis ojos. Es una energía que proviene de una pila caprichosa que sólo ha respondido a tu mirada. Cuando te escribí la poesía, ella le puso música a las letras con el tambor de mi corazón. Debo admitir que sus caprichos enlutan mis hazañas, me retacea la fuerza si vos no estás presente. Me hace fracasar en los intentos de alivio que busco en otra mujer. Ayer, cuando tuve la oportunidad de retener tu cuerpo unos segundos, un grito de calor invadió el silencio de mis venas.
Hoy puedo todavía, retener la nostalgia de haberte puesto mi mano en la cintura con el brazo rodeándote
No me importa si funciona por tus milagros o si este amor es sólo brujería, que obediente y loco llega a tiritar mis dientes. Despierta la emoción y coincidencia, dejando huellas que no se borran con la primera lluvia. Se celebra y estremece sin evadir
No me hace falta un paraíso donde esté prohibido morder una manzana, porque el fruto prohibido, es el paraíso. Nuestra locura necesita el lugar de todo lo posible, donde los límites sean tan tímidos que se acerquen sólo al amanecer. Es una pila con ruido de galope desbocado que no da cuenta a su dueño y exige correr, sólo sobre la piel elegida. Se hamaca, suspira conmovida ante tanta belleza y entre tanto temor a que se acabe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario